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jueves, 10 de mayo de 2012

Garantizar el respeto a un carril ciclista

Recién pedaleaba por Centenario, donde hay una ciclovía marcada entre Churubusco y Xicoténcatl. La ciclovía está pintada con doble raya y algunas vialetas. Frente a una taquería, en la esquina de Centenario, Xicoténcatl y Aldama siempre hay autos estacionados sobre la ciclovía. Ahora la violación al reglamento llegó a niveles ridículos: el quiosco del Valet Parking se estacionó en el carril ciclista. Pues bien, llegué, fotografié el módulo y marqué a la policía. Debo reconocer que las autoridades tuvieron capacidad de reacción y en menos de cinco minutos estaban en el lugar preciso. El adjetivo preciso es pertinente: llegaron tres patrullas y se estacionaron en el carril ciclista. Primero de buena manera, luego ya molesto, pedí dos cosas. En primer lugar, que retiraran el objeto del lugar, puesto que la Ley de Establecimientos Mercantiles da atribuciones para ello, amén de otros ordenamientos. Lo segundo que pedí a la policía fue que estacionaran sus patrullas en el lugar correcto. En la otra acera. Eso fue lo que terminó encendiéndome, pues en primer lugar me dijeron que debían estacionarse en el carril más próximo a la derecha, luego me salieron con argumentos respecto a que después de las 10 de la noche ya se podían estacionar allí, y finalmente, cuando yo tomé video de las patrullas, ellos terminaron videofilmándome mientras un policía narraba que estaban dándome el apoyo y yo no quedaba satisfecho. En algún momento hasta un policía dijo Acomode su bicicleta donde no estorbe, si no también la remitimos. Los policías terminaron remitiendo al juez cívico al encargado del valet parking y me pedían que los acompañara. Yo les dije, que lo único que me interesaba era el retiro del quiosco del valet parking, no veía responsabilidad en un empleado sino en un negocio. Cuando se fueron sus compañeros, y sólo quedó la patrulla P5775, el conductor la estacionó en un lugar correcto. Durante 20 minutos estuvieron tratando de conseguir una camioneta para llevarse el quiosco con el juez cívico y la historia terminó con la pregunta ¿usted no tiene una camioneta? ¿Nos va a ayudar a empujarlo? Podría haberme quedado una semana completa en el lugar y la autoridad no se habría llevado el quiosco. Creo que lo que yo busqué fuera una sanción ejemplar al establecimiento terminó como un reforzamiento del poder que tienen los que violentan la ley, porque hacerla cumplir siempre es más complicado. La ruta, no me cabe duda, es hacer cumplir la ley. Que si un auto se estaciona en la ciclovía reciba una multa siempre o casi siempre; que si un valet parking se apropia del espacio, se le decomise el quiosco y se sancione al establecimiento, que los policías reciban capacitación en materia de tránsito con un enfoque de respeto al peatón y al ciclista. Al final de cuentas, el estado que debería recibir la mayor sanción es la no sanción, que la autoridad reciba castigos cuando no haga cumplir la ley. Veremos si pronto eso empieza a cambiar. Los videos que tomé están disponibles aquí. Todavía tengo pendiente la presentación de una denuncia contra el establecimiento en la delegación Coyoacán. Me queda una última duda ¿por qué tuvieron que llegar 3 patrullas para una cosa tan nimia? ¿no bastaba con una sola con dos policías bien capacitados? ¿o una y una camioneta?

2 comentarios:

Rodrigo dijo...

Pues es que hermano tu tono y tu narrativa de superioridad ("para eso sirve la policia?") contradicen tu discurso. Creo que para empezar deberias respetar su trabajo, y a ellos como personas, y asi quizá las cosas mejorarían. Ahora si que tan sagrada es tu intención, como béndito su trabajo.

Roberto Remes Tello de Meneses dijo...

Entiendo los "aires de superioridad" que cuestionas, y te puedo dar la razón parcialmente. Sin embargo, yo tengo derechos y puedo exigirlos hasta la insolencia, porque su incumplimiento supone una insolencia superior. Aquí es un trabajo de picar piedra y eso hacemos todos los ciclistas y peatones que nos ponemos bravucones con la autoridad.